Lo que Brecht intentaba antes de la segunda gran guerra,o sea, hace más de treinta años, lo “ensayamos” ahora aquí como si fuera algo nuevo,y las petrolerías bastardas son acogidas con bravos estentóreos por jóvenes que creen que están viendo novedades. Yo no sé quién tiene la culpa de que nos reunan a personas serias para representarnos teatro didáctico de Brecht. Pero así ocurrió anoche.

Nicolás González Ruiz: ‘Brecht, en el Beatriz’, Ya, 17-X-1967, p. 33

La compañía de Mimo-Teatro Español Bululú ha sido elegida por el Teatro Nacional de Cámara y Ensayo para representar en el escenario del Beatriz su “Programa Bertold Brecht” durante cinco sesiones. Confieso que asistí al estreno con algún recelo y no por Brecht… sino por los brechtianos, mucho más radicalistas que el maestro a quien siguen. (…) apenas iniciada la acción tuve que desechar prejuicios que advertí infundados. “El sabio y el aduanero” en el montaje concebido por Bululú, mantenía una línea de absoluta fidelidad a las directrices dadas por Brecht a su teatro, al menos en las llamadas “piezas didácticas” – a las que también pertenece “La excepción y la regla”. A ello contribuye – al margen de la certera labor seleccionadora en la obra poética de Brecht – el carácter de Mimo-Teatro de la compañía, pue el género mímico, por su procedencia popular y la apoyatura que en él recibe la palabra mediante gestos y movimientos que vienen a reforzarla, es el más adecuado al teatro de Brecht. (…) Portentosa la dirección de Antonio Malonda y la tarea interpretativa del conjunto, con mención especial para Amparo Pamplona, que da a sus breves intervenciones matices insospechados. Atención a esta joven actriz, que obtuvo el premio Lucrecia Arana en la Escuela de Arte Dramático y dará mucho juego en el futuro inmediato de nuestro teatro.

Juan Emilio Aragonés: ‘Brecht y los brechtianos. Beatriz: El sabio y el aduanero y La excepción y la regla, de Bertold Brecht’, Informaciones, 17-X-1967, p. 33

“Los actores del Bululú hicieron sobre todo un alarde de expresión corporal. La sencillez de la frase queda valorada por la amplitud del ademán. El mensaje, reforzado por el gesto. La protesta, exaltada por el grito. Faltaba en la puesta en escena la riqueza luminotécnica con la que el maestro daba esas deslumbradoras impresiones de amplios espacios, alejándonos así notablemente de sus violentas críticas, sus dramas, trasplantados a lejanos desiertos chinos (…).  Como el propósito del Bululú parece ser obtener el aplauso colectivo o la censura comunal, no destacamos a ningún actor. Ni aun a los tres o cuatro que llevan los personajes principales. Lo mejor de esta agrupación es haber logrado convincentes ritmos colectivos, ajustando empaste de movimientos y actitudes; plástica sugestiva que apoya el desarrollo de la lección brechtiana. Tanto Jesús Sastre como Antonio Malonda demuestran haber asimilado bien la técnica de Brecht y ser fieles a su espíritu. Por ello, pese al tono menor de las dos piezas en la cosmogonía brechtiana, el trabajo merece ser visto y aplaudido.

Lorenzo López-Sancho: ‘Dos versiones de Brecht, por el Bululú, en el Teatro Beatriz’, ABC, 18-X-1967, p. 103-104.   

La excepción y la regla / El sabio y el aduanero, de Bululú.

Espectáculo compuesto por dos piezas: 'El sabio y el aduanero' y 'La excepción y la regla'. Bululú presentó la pieza breve La excepción y la regla junto con una pieza que es una adaptación de textos no teatrales de Bertolt Brecht, un poema titulado Leyenda sobre el origen de Tao Te King y otros textos.

Estrenada el 17 de octubre de 1967 en el Teatro Beatriz de Madrid.

Dirección: Jesús Sastre y Antonio Malonda.

Intérpretes: Yolanda Monreal, Amparo Pamplona, Javier Gascón, José Enrique Camacho, Jesús Alcaide, Gregorio Arroyo, Francisco Casares, Vicente Cuesta, Miguel Díaz, Modesto Fernández, Francisco Heras, Emilio Hernández, Julián Llinas, Francisco P. Racionero, Julio Reviriego y Juan Valverde.